“Sal de tu móvil y entra en tu vida”. J.Pascual
La adicción al móvil o nomofobia es un problema que afecta a millones de usuarios y que no siempre es fácil detectar. ¿Cuántas personas se ven en espacios públicos hoy utilizando su móvil? Probablemente muchas.
Seguramente todos nosotros lo usamos como algo habitual. Y lógico, ya que cada vez los teléfonos inteligentes tienen más funcionalidades interesantes.
El problema es que el uso habitual prolongado en ocasiones puede derivar a una adicción al móvil, y eso sí que no tiene nada de positivo, al contrario, conlleva problemas que pueden llegar a ser muy graves.
Otro de los temas importantes y que pueden generar problemas psicológicos a las personas obesas, son los estigmas de la sociedad actual hacia la apariencia física como un indicativo de personas que no se cuidan o tienen falta de moral.
Un estudio reciente de IAB Spain señala que la media de uso diaria del móvil es de 3 horas. Puesto en contexto, eso quiere decir que de cada ocho días, pasamos uno entero utilizando el móvil. De esta manera, el problema no es tanto de tiempo de uso sino de adicción al móvil. Sentir la necesidad de utilizarlo, dejar de lado otras actividades por usarlo y priorizar su manejo a cuestiones como los amigos, la pareja, el trabajo, los estudios, el sueño o incluso la propia salud.
Signos de la adicción al móvil independientemente de la edad
Es importante diferenciar entre un uso continuado y un uso adictivo del teléfono móvil, independientemente de la edad. Si se sufre varios de estos síntomas de manera prolongada en el tiempo o detectas que los sufre una persona cercana, ten claro que podemos encontrarnos ante una adicción al móvil.
- Debido a tu uso del uso del móvil se dañan relaciones personales o incluso pone en riesgo el puesto de trabajo.
- Perder el sentido del tiempo cuando utilizas tu teléfono móvil.
- Sentir ansiedad, tristeza, ira o depresión cuando no puedes utilizar el móvil.
- Quedar sin batería te agobia y te pone muy nervioso.
- Pensar en quedarte sin el móvil unas horas te preocupa o te causa ansiedad.
- Usar el móvil comiendo, estando con otras personas o viendo la televisión incluso si es un programa que gusta.
- Poner en riesgo la vida o la de otros por usar el móvil. Por ejemplo, utilizándolo al conducir o al cruzar la calle para enviar un mensaje o leerlo.
- Llevar el móvil en cada rincón de tu hogar.
- Mentir sobre cómo, cuándo o cuánto usas el teléfono móvil.
- Lo primero que haces por la mañana tras despertarse es mirar el móvil.
- Lo último que haces cada noche al acostarse es mirar el móvil.
- Dormir con el móvil encendido bajo la almohada o en la mesilla.
- No saber cómo usar menos el móvil aunque se intente y hay necesidad de reducir su uso.
- Personas cercanas, dicen reiteradamente que tienes un problema con el móvil.
Cómo prevenir este problema
La prevención es clave para evitar que niños y adolescentes lleguen a sufrir un problema de adicción al móvil más adelante. Si tienes hijos o hijas y te preocupa esta cuestión, es importante que conozcas las herramientas y modos de actuación para ayudarles a hacer un buen uso del móvil y para no caer en un uso adictivo del mismo.
Estos consejos pueden ayudar a prevenir esta adicción conductual en tus hijos o hijas:
- Educar con el ejemplo. No exigir lo que tú no estás dispuesto a hacer. Si haces un uso desmedido, inapropiado o abusivo del móvil, estás enseñándoles a hacer lo mismo.
- Poner restricciones al uso del móvil. Señala determinadas horas al día o situaciones en las que está permitido y prohibido su uso. Marca un tiempo máximo de uso lúdico del mismo y asegúrate de que se cumple.
- Educar con el uso del tiempo de ocio y proponer opciones interesantes que les permitan no centrarse únicamente en lo que pueden hacer desde el móvil.
- Seleccionar contenido adecuado para su edad.
- Cuidar el uso adecuado de los programas y herramientas de control parental en el teléfono móvil.
Tratamiento de terapia breve para solucionar la adicción al móvil
El tratamiento de terapia breve de la adicción al móvil pasa por la implicación y colaboración de la persona adicta. En las adicciones conductuales, como en cualquier otra adicción, es esencial para un tratamiento rápido, efectivo y permanente en el tiempo.
La colaboración y apoyo de la familia es clave para el éxito de estas terapias, no solo en niños y adolescentes sino también en la edad madura.
El problema con el móvil es que a diferencia de otras adicciones no se trata de desterrar totalmente su uso, porque en el contexto actual es necesario, sino de aprender a usarlo de forma controlada.
Antes de iniciar la terapia el primer paso es la evaluación del problema, ya que de esta depende las actuaciones a seguir.